Allá por 2012 me vino una idea que hacía tiempo tenía en la cabeza. ¿Por qué no darle una vuelta al concepto de la zapatilla? ¿Por qué no es posible una zapatilla con la que vestir y jugar al mismo tiempo? Un proyecto que decore ese pequeño piececito como si fuera un lienzo. Una obra de arte en miniatura.
Y así fue como surgió Carlottas: un espacio en el que fabricamos, con mimo y cariño, unas zapatillas en las que el niño es el auténtico protagonista. Un trabajo artesanal en el que empleamos productos locales y en el que la figura del niño ocupa desde el primer minuto toda la atención.
Muchas gracias por acercarte a nuestra humilde morada. Solo te damos un consejo: deja que tu niño elija el diseño, él es el protagonista.